viernes, 21 de marzo de 2014

21 de Marzo. Para Jessica y Anónimo.

Realmente creo que he escrito bastantes veces sobre lo que me pedisteis, sin pensarlo. De todas formas, mis libros cuentan una historia parecida, no sé si los habréis leído, pero creo que os pueden gustar. Aquí tenéis lo que me ha salido al leer vuestra idea, aunque quizás no encaje del todo con lo que tengáis en mente…aún así espero que os guste, y como siempre, gracias por leer-me. :)


No soy capaz de recordar en qué momento dejamos de ser dos desconocidos para convertirnos en conocidos, ni cuándo dejamos de serlo para comenzar algo parecido a una amistad. Tampoco sabría decir cuándo ese proyecto de amistad paso a algo más, y cuándo ese algo más se convirtió en eso que despierta en uno la agradable y a su vez desconcertante sensación de "dónde habrás estado todo este tiempo", o "no sé de quién habrá sido la genial idea de que tú y yo volviésemos a respirar el mismo aire".  Me gusta su sonrisa. Me gusta desde siempre, desde la primera vez que le vi, le di dos besos y me dijo su nombre. No sé qué es lo que tienen esos hoyuelos, pero cada vez que sonríe me dan ganas de sonreír a mí también. Me gusta la forma en la que se sujeta la mochila cuando camina. La forma en la que camina, sus maneras, esa sensación de que a su paso alguien va extendiendo una alfombra roja y miles de flashes le deslumbran por el camino que pasa. Me gusta cómo viste, y cómo se desviste, aunque eso no sé si me gusta o sólo me lo imagino, de momento. Me gusta su voz. Su voz y su forma de hablar, su forma de expresarse, me da tranquilidad, me genera confianza…me da paz. Me gusta cómo se revuelve el pelo, me gusta su pelo, despeinadamente peinado, sin orden ni gobierno y ordenado al mismo tiempo. La música que escucha. Mi música, es mía, no sé por qué tiene que escucharla él también…aunque eso también me gusta.  Me gusta cómo desplaza sus dedos sobre las teclas del ordenador. Me gustan sus manos llenas de venas, y lo que es capaz de hacer con ellas. Sus ideas, su creatividad, esa facilidad que tiene para crear un algo de la misma nada, esa imaginación que le desborda por los poros de la piel y esa osadía que muestra ante la hoja en blanco. La inspiración que me transmite, que hace que cuando escribo versos sea mi mejor excusa para darles melodía. La sensibilidad que deja ver tras la armadura y la máscara, a veces. Me gustan sus ojos, o más bien su mirada, cómo me mira. Sus buenos días, y sus buenas noches. Sus besos. Y su forma de besar. Me gusta, me gusta mucho, aunque nunca tenga la certeza de volverlos a probar. Me gusta verle, y que me apetezca verle, a pesar del miedo. Cuando le veo se me pasa. Su discreción, y su engañosa timidez, que no me la creo, pero a veces no soy capaz de adivinar lo que hay detrás de ella, lo que le pasa por la cabeza. O por el alma, que al fin y al cabo me interesa más. Me importa más. Eso no me gusta tanto…para qué engañarnos, eso no me gusta nada. Y es que hay veces que se expone sin censuras y veo amaneceres en sus ojos, pero en cambio hay otras en las que cierra los museos y sólo deja abiertas las tabernas nocturnas, las oscuras y frías calles y algunas avenidas sin nombre, o con nombre de guerra. Y en las letras de su nombre es donde encuentro yo sentido a las letras de los versos que de vez en cuando escribo, que sin querer suenan a él. Y me viene el desconcierto, las dudas, tiemblo de frío. Que es cierto que a veces no es blanco, ni negro, pero cuando los grises comienzan a hacerte retroceder lo mejor es ser sincero. Y si ser radicalmente sincero es lo más parecido a caminar borracho sujetando un jarrón de porcelana china…que camine, que si hace falta, yo me encargo de recoger los pedazos. 

1 comentario:

  1. Muchísimas gracias Raquel. Es verdaderamente precioso. No he leido nunca ninguno de tus libros, pero te sigo a diario en este precioso blog a la espera de leerte... Un abrazo y que sigas llenandote de inspiración.

    Otro tema... Como el se hace el duró ante la gente, que se pone su coraza como que no siente nada... Y luego cuando estan solos... Te demuestra lo importante que eres.

    Mil gracias...

    ResponderEliminar